Hola, hola!! Amigo, si, a ti te hablo. Disculpa que te hable sin conocerte, pero veo en tu rostro que algo te preocupa, algo te inquieta. Veo que estas caminando sin esperanza alguna. Oye, no te conozco, pero quiero que sepas, que sea lo que sea, que estés pasando y que este perturbando tu mente, todo tiene solución. Mientras hay vida, hay esperanza dice el dicho.
Mientras caminaba, te vi y quise saludarte. Seas quien seas, quiero decirte que eres una persona especial. Veo en tus ojos, un ser humano con un gran corazón. Un poco desorientado y preocupado sí, pero creo que con muchos sueños y metas que quisieras lograr. No sé lo que estás pasando, pero quiero que sepas que nada es imposible y nada dura para siempre. Sea lo que sea que ahora te duela y te agobie, es cuestión de tiempo para que todo pase y puedas ver los rayos del sol, que harán resplandecer tu vida nuevamente.
Talvez ahora estés triste, sin esperanza y sin deseo de seguir luchando. Pero te cuento un secreto. Una vez, yo estuve igual que tú. Pensé que nunca saldría del abismo donde me encontraba. El dolor era tan profundo, que pensé que moriría. Mis lágrimas se habían secado de tanto llorar. Pero sabes? Salí de allí.
Pensé que no lo lograría, pero lo hice. Por eso, hoy te puedo decir con seguridad, que es cuestión de tiempo, para que tú también salgas de esa aflicción que te atormenta. Te aconsejo que hagas lo que yo hice. Espero te ayude.
Busca estar en paz con Dios y con las personas. Es normal que sintamos, que Dios no nos ama cuando estamos pasando momentos difíciles, y nos alejamos y olvidamos de Él. Quiero decirte, que cuando más cansado te sientas por los problemas, es cuando Dios te lleva cargado en sus brazos y así puedas seguir adelante. De lo contrario, te hundirías en una profunda depresión. Cuando más triste y solo te sientes, es cuando Él está más cerca de ti. Abre tu corazón a Dios y miraras lo que El hará.
Si estas resentido o molesto con alguien, ya sea de tu familia o amigo, trata de reconciliarte con ellos. Deja el enojo, el orgullo, y el rencor a un lado y abre tu corazón al perdón. Sera como un refrigerio a tu interior. Perdona y si tienes que pedir perdón, hazlo. Así serás libre de todo dolor que presiona tu pecho. Suelta y deja que todo se vaya. Mejor enfócate en tus metas y sueños. Creo que son muchas y buenas. Cuéntale a Dios cuáles son tus sueños. Aunque El todo lo sabe, le gusta que le contemos nuestros planes.
El será tu mejor guía y consejero. Descansa en El. Talvez hoy solo puedas ver murallas frente a ti; pero viene el día en que todo tendrá sentido, de todo lo que hoy estas pasando. Lo único que te puedo decir, es que no te rindas. No es casualidad que me haya detenido a hablar contigo, aun sin conocerte. Lo que más me sorprende, es que te hayas detenido a escucharme.
Dios sabia de tu necesidad, y quiso que compartiera estas palabras contigo. En Dios no hay casualidades ni coincidencias. En Dios hay propósitos. Vamos amigo, ánimo. Todo lo mejor para ti, esta de camino. Prepárate para recibirlo. Sea lo que sea, todo se resolverá. Todo tendrá sentido. Un día te reirás de lo que ahora estas pasando y sintiendo.
Dios no se ha olvidado de ti. A El, nada le toma por sorpresa. El está en control de todo, lo entiendas o no. El cuida de ti en todo momento. Viene el día en que todo tendrá sentido. Tus lágrimas de ahora, se convertirán en regocijo. Ese día viene en camino. Espéralo.
Escrito por:
Keidy Rodríguez es nacida en Juticalpa, Honduras y criada en Guaimaca Francisco Morazán. Es maestra de profesión y su pasión es escribir. Cree y sabe que es un talento que Dios le ha dado. Cuando los días están nublados y lluviosos es cuando más se inspira para escribir. Actualmente es miembro de la Asociación Internacional de Poetas y Escritores, Arte y Cultura Hispana (AIPEH) con sede en Orlando, Florida.
